miércoles, 25 de septiembre de 2013

ALGO EMPIEZA A MOVERSE CONTRA EL PAPA FRANCISCO


Son muy pocos los meses que lleva el Papa Francisco al frente de la Iglesia Católica y resulta que empiezan a dejarse oir las primeras voces críticas y los primeros comportamientos reaccionarios. Estas reacciones externas contra el nuevo Papa han surgido a partir de la entrevista concedida por el Papa Bergoglio a la revistas de los Jesuita,"Civiltà Cattolica". Juan Manuel de Prada, uno de los grandes escritores católicos del momento actual en España, es quien ha encabezado, explícitamente, este enfrentamiento frente al Obispo de Roma, sus gestos y sus palabras. Tengo a J. M. de Prada en gran estima personal y profesional, pero, no estoy de acuerdo con las manifestaciones referidas.
Al Papa hay que leerle en su totalidad. Lectura que no solamente ha de limitarse a lo que dice o escribe, sino, tomando en consideración, a la vez lo que hace. Tenemos que interpretar sus palabras y sus gestos de un modo conjunto y global. Asimismo, no podemos quedarnos en una/s frase/s concreta/s, sino que hemos de valorarlas en su conjunto. El Papa, y esto es tan obvio que no necesita demostración -valga la redundancia-, es un creyente, es -él mismo lo dice, como no podía ser de otra forma- un hombre de Iglesia. El es un creyente que recibe su fe de la Iglesia y esta fe radica en descubrir en Cristo el amor misericordioso que Dios nos ha mostrado a todos los hombres. La humanidad de Jesucristo no se limita solamente a la encarnación, en una naturaleza humana, de la segunda persona de la Trinidad, sino que esa encarnación continúa llevándose a cabo en cada uno de los hombres, a los que ha venido a mostrar el camino del amor de Dios y, por ello, salvarlos. La carne de Cristo se actualiza sacramentalmente, sí, en la Eucaristía y en los demás sacramentos, pero, también, existencialmente, cada ser humano, hombre o mujer, debe ser para los cristianos la carne de Cristo. Hemos de valorar a cada ser humano en sí mismo, por lo que es y valorando su dignidad humana, y descubriendo en él el rostro de Cristo.

El Papa sabe, así lo manifestó ayer mismo, que la Iglesia una -aunque plural en sus personas y manifestaciones-, la sucesión apostólica mediante los Obispos y hasta nuestros días, en comunión con el sucesor de Pedro, las fuentes sacramentales y la caridad fraterna siguen siendo el hontanar nutricio de la Iglesia de Cristo. No podía ser de otra forma. Y ésto no lo dice él, novedosamente, sino que continúa con la tradición de la Iglesia, que hemos recibido. Con la fe recibida. El Papa habla muy claro. La claridad está tanto en sus gestos como en sus palabras. Y pienso que si nos acercamos a él con buena fe, liberados de prejuicios e ideologías, veremos que lo que, primordialmente, nos quiere transmitir es el mensaje de misericordia y ternura que Dios nos muestra en Cristo y, por tanto, en su Iglesia. Que la fe en este evento salvífico que tiene como centro a Jesucristo y a su Iglesia no sea empañado o sirva de motivo de alejamiento si a su proclamación, a su kerigma, anteponemos el resultado de esa fe, traducido en comportamientos morales, sociales y religiosos. Primero la fe, nos viene a decir -esencialmente- y, después, la religión, la moral, los usos y las costumbres. No que éstos no sean importantes, sino que no sean lo primero. Y sobre todo, no podemos permitir que nadie se aleje de la Iglesia por que le presentemos primero nuestras actitudes religiosas, morales o de comportamiento antes que el mensaje misericordioso de Dios: Dios se ha acercado en Cristo y se sigue acercando en la Iglesia a todos los hombres, de un modo particular a los más necesitados, a los más marginados, a los más pobres, a los más pecadores.

Es un estilo nuevo o, como se dice frecuentemente, un aire nuevo en la Iglesia. Abramos las ventanas y puertas de nuestro corazón y que ese aire nuevo, pero el miso ayer y hoy, nos renueve permanentemente para vivir fraternalmente nuestra fe. Si lo hacemos sinceramente, será una fe vivida en alegría, cofraternidad, solidaridad y amor. Y esa fe, así vivida, será atrayente para nuestros contemporáneos.

viernes, 6 de septiembre de 2013

REENTRADA

Mucho tiempo sin poner una sola letra en el Blogg. Por un lado, el verano que invita al relax y, por otro, ciertos problemas con el password, que, parece, ya se han solucionado. En este tiempo la vida ha seguido su curso, la sociedad continúa caminando y se amontonan los temas sobre los que se puede dejar aquí alguna reflexión o constancia. Me esforzaré, un poco, en que así sea.