lunes, 28 de febrero de 2011

VIII DOMINGO TIEMPO ORDINARIO




En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:



«Nadie puede servir a dos
señores. Porque despreciará a uno y amará
al otro; o, al contrario, se dedicará al
primero y no hará caso del segundo. No
podéis servir a Dios y al dinero.


Por eso
os digo: no estéis agobiados por vuestra
vida pensando qué vais a comer, ni
por vuestro cuerpo pensando con qué os
vais a vestir. ¿No vale más la vida que el
alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad
los pájaros del cielo: no siembran ni
siegan, ni almacenan, y, sin embargo,
vuestro Padre celestial los alimenta. ¿No
valéis vosotros más que ellos? ¿Quién
de vosotros, a fuerza de agobiarse, podrá
añadir una hora al tiempo de su vida?
¿Por qué os agobiáis por el vestido?


Fijaos
cómo crecen los lirios del campo: ni
trabajan ni hilan. Yos digo que ni Salomón,
en todo su fasto, estaba vestido como
uno de ellos. Pues si a la hierba, que
hoy está en el campo y mañana se arroja
al horno, Dios la viste así, ¿no hará
mucho más por vosotros, gente de poca
fe?


No andéis agobiados pensando qué
vais a comer, o qué vais a beber, o con
qué os vais a vestir. Los paganos se afanan
por esas cosas. Ya sabe vuestro Padre
celestial que tenéis necesidad de todo
eso.


Buscad sobre todo el reino de
Dios y su justicia; y todo eso se os dará
por añadidura. Por tanto, no os agobiéis
por el mañana, porque el mañana traerá
su propio agobio. Acada día le basta su
desgracia».
Mt 6, 24-34

sábado, 19 de febrero de 2011



Benedicto XVI se dirige en particular a estos jóvenes, y les dice que, «a menudo, la pasión y la cruz de Jesús dan miedo, porque parecen ser la negación de la vida. En realidad, es exactamente al contrario.


La cruz es el Sí de Dios al hombre, la expresión más alta y más intensa de su amor y la fuente de la que brota la vida eterna.


Queridos jóvenes –les exhorta–, aprended a ver y a encontrar a Jesús en la Eucaristía, donde está presente de modo real por nosotros, hasta el punto de hacerse alimento para el camino; pero también y atraviesan dificultades, que necesitan vuestra ayuda».

VI DOMINGO TIEMPO ORDINARIO



Evangelio
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:
«No creáis que he venido a abolir la
Ley y los Profetas: no he venido a abolir, sino
a dar plenitud. En verdad os digo que antes
pasarán el cielo y la tierra que deje de
cumplirse hasta la última letra o tilde de la
Ley. El que se salte uno solo de los preceptos
menos importantes y se lo enseñe así a
los hombres, será el menos importante en
el reino de los cielos. Pero quien los cumpla
y enseñe será grande en el reino de los
cielos. Porque os digo que, si vuestra justicia
no es mayor que la de los escribas y fariseos,
no entraréis en el reino de los cielos.
Habéis oído que se dijo a los antiguos:
No matarás, y el que mate será reo de juicio.
Pero yo os digo: todo el que se deja llevar de
la cólera contra su hermano, será procesado.
Habéis oído que se dijo: No cometerás adulterio.
Pero yo os digo: todo el que mira a
una mujer deseándola, ya ha cometido adulterio
con ella en su corazón. Se dijo: El que
repudie a su mujer, que le dé acta de repudio.
Pero yo os digo que, si uno repudia a su
mujer –no hablo de unión ilegítima– y se
casa con otra, comete adulterio. También
habéis oído que se dijo a los antiguos: No jurarás
en falso y Cumplirás tus juramentos
al Señor. Pero yo os digo que no juréis en
absoluto. Que vuestro hablar sea Sí, Sí; No,
No. Lo que pasa de ahí viene del Maligno.
Mateo 5, 17-37

miércoles, 16 de febrero de 2011

CÁRITAS, AL LÍMITE


Cáritas, al límite


En los dos últimos años, se han
duplicado el número de solicitudes
atendidas en nuestros servicios de
acogida y atención primaria
. Esta
realidad supone un auténtico reto para
la misión cotidiana desarrollada por
nuestras Cáritas y cada uno de nuestros
agentes, que multiplican sus esfuerzos
para atender las demandas de un
número creciente de personas expuestas
a condiciones de precariedad.


Esta realidad se ve agravada por la
insuficiente respuesta de los servicios
públicos, la aplicación de nuevos
recortes sociales y el insuficiente
alcance de las políticas sociales para
atender los derechos básicos de los
ciudadanos más golpeados por la crisis
económica.


Por ello, insistimos en la obligación
de los poderes públicos de aumentar los
recursos de los servicios sociales para
las personas más vulnerables, al tiempo
que reiteramos con rotundidad que la
acción de ayuda que podemos realizar
desde Cáritas tiene unos límites que ya
están superados y que, dado el recorte
en los recursos públicos, lo estarán
aún
más.


Convencidos de que la Ayuda al
Desarrollo no es sólo un lujo para los
tiempos de bonanza, denunciamos los
recortes en la Ayuda Oficial al
Desarrollo y reafirmamos nuestra
voluntad de presionar a todas las
Administraciones públicas para que se
cumplan los compromisos adquiridos.
Llamamos a todos los ciudadanos a
rechazar cualquier medida que suponga
una restricción en el acceso a los
derechos sociales de las personas
migrantes.


Dirigimos un llamamiento a la
responsabilidad de todos ante las
próximas elecciones autonómicas y
locales.
Y convocamos a los grupos políticos
para que asuman y cumplan el Pacto de
Estado contra la Pobreza firmado el 19
de diciembre de 2007, y para que
suscriban un acuerdo marco por la
inclusión social y el empleo de los más
vulnerables, con la participación de
todos los actores sociales.




Cáritas Española
de la Declaración final
de su LXVII Asamblea General

martes, 15 de febrero de 2011

LA X EN EL IRPF: MÁS CONTRIBUYENTES MENOS INGRESOS


La noticia que, entrecomillada, cuelgo hoy está tomada de El Confidencial.com. Es interesante resaltar como la dura crisis está siendo la ocasión propicia para que muchos españoles, católicos o no, se fijen en la Iglesia como una de las pocas instituciones que siempre está ahí, al lado, cuando se la necesita. Por encima de los fallos que tenga y queramos echarle encima, lo cierto es que el español de a pie nos damos cuenta que los comedores y roperos de la Iglesia y la atención personal de los hombres y mujeres de Cáritas, el hombro amigo del sacerdote en que puedes apoyarte y que te pregunta por lo tuyo son una realidad tangible.

La Iglesia descubre su rostro más verdadero cuando está cerca del pobre y necesitado. Cierto que históricamente ha estado, a veces, demasiado arrimada al poderoso, pero, su verdadera esencia es encontrar a Cristo en el hermano más pequeño. Bien lo saben tantos y tantos parados -de los 5 millones que hay en este momento- que han encontrado en la Iglesia una acogida y un apoyo que ni el mundo político, ni el financiero ni el empresarial han sabido darles. Obras son amores y no buenas razones, dice nuestro pueblo. Y, por eso, acudimos a la Iglesia confiando en su buen obrar. Sin necesidad de propaganda, márketing ni demás mandangas publicitarias sus puertas y las de sus instituciones -Cáritas, Manos Unidas, Comedores Asistenciales, Roperos parroquiales...- están abiertas socorriendo a tanto necesitado que hoy sufre e, indirectamente, solucionando un problema social al Estado y sus Administraciones. Sin esta ayuda callada -al igual que la de las familias, que acogen y sostienen a tantos miembros en paro y, en muchos casos, sin subsidio- quizá la paz social que disfrutamos hubiera estallado ya.

Es cierto que el importe de los ingresos producidos por la X en la declaración de la renta ha bajado en tres millones. Lógico, estamos en crisis. Pero, es esperanzador que han subido en casi 66.000 el número de españoles/contribuyentes (hay muchos declarantes que no son españoles) que han marcado la X a favor de la Iglesia.
¡Que acabe pronto la crisis!

Y ahora el comentario del referido digital:


"La Iglesia recibe 250 millones del 0,7%
La Iglesia católica ha recibido casi 250 millones de euros correspondientes al 0,7% del IRPF que los contribuyentes le asignaron al marcar su casilla en la declaración de la Renta de 2010. Según datos facilitados hoy por la Conferencia Episcopal Española (CEE), han sido 7.260.138 millones de declaraciones con la asignación para fines sociales a favor de la Iglesia, lo que supone casi 66.000 declaraciones más que el año anterior. En los últimos tres años se ha producido un aumento de declaraciones a favor de la Iglesia católica de 777.983, hasta llegar al actual 34,75% del total. Pese al incremento en el número de contribuyentes que destina su 0,7% a financiar la labor de la Iglesia, la recaudación total de 2010 ha sido de 3.225.724 euros menos que el año anterior".

lunes, 7 de febrero de 2011

AZNAR Y LA REVISTA DE GUERRA COINCIDEN


Hace unos días colgué aquí la opinión de Aznar: Hay que reformar la Constitución, pues, las Autonomías no pueden ser 17 mini-estados. Muchos critican al expresidente por ello. Pero, mira por donde, desde la otra ladera, la izquierda, Guerra y sus adláteres de la revista Temas -Manuel Muela y Tezanos- se expresan en el mismo sentido. Por eso, me parece muy oportuno poner también aquí la opinión de la revista de izquierdas, pues, no es fácil coincidir en el diagnóstico entre gentes tan dispares. De SIGLO XXI, diario digital, tomo la noticia que, a su vez, recibe de Servimedia.
Román Encabo.


La revista de Guerra ve al Gobierno "sobrepasado" y al PSOE anclado en la "anemia" y el "culto" a Zapatero



- Dos artículos insisten en recomendar una "gran coalición" de "emergencia nacional"

MADRID, 06 (SERVIMEDIA)



El economista Manuel Muela, miembro del Consejo de Redacción de la revista "Temas para el debate", presidido por Alfonso Guerra, señala en un artículo publicado en el número de febrero que el Gobierno está "sobrepasado por los problemas" y el PSOE anclado en la "anemia" y preso de un "excesivo y antidemocrático culto a la personalidad" de su líder, José Luis Rodríguez Zapatero.

En el texto, recogido por Servimedia, Muela interpreta así que los socialistas estén pendientes de si Zapatero se presenta o no a las elecciones de 2012 en lugar de sustituir al Gobierno o convocar comicios anticipados. Al mismo tiempo, critica al PP por enrocarse en un "distanciamiento desmovilizador" mientras espera el derrumbe del PSOE para llegar cómodamente a La Moncloa.

En esta tesitura, el autor estima que, "si no se produce la reacción del partido y/o el grupo parlamentario del Gobierno, el Congreso de los Diputados, órgano supremo de la soberanía nacional, debería adoptar la iniciativa para lograr la constitución de un nuevo gobierno que merezca la confianza abrumadora del Parlamento".

El economista piensa que ésta sería "una solución política a la crisis española", tal y como titula su texto, pues ese Gobierno podría "ejecutar un plan nacional que sanee la economía, que restaure la confianza interna y externa y que inicie la apertura de un proceso de revisión constitucional" del papel de las comunidades autónomas.

Si Muela concreta su recomendación en "un gobierno de gestión para lo que queda de legislatura", que especifica sería un "gobierno de emergencia nacional", el director de "Temas para el debate", José Félix Tezanos, insiste en otro artículo de la revista en las "ventajas" que tendría para España un gobierno de "gran coalición", que ya ha tenido éxito en el Reino Unido.

Tezanos constata que hasta ahora los sucesivos gobiernos democráticos españoles "no han requerido coaliciones permanentes" y el sistema ha funcionado bien "de acuerdo a la lógica de mayorías o minorías". Sin embargo, cree que las "circunstancias excepcionales, y muy delicadas", del momento actual, aconsejan recurrir a esta solución que defiende "el 80% de la población".

Teniendo en cuenta la coyuntura económica, el "cansancio" social ante "la confrontación partidaria sistemática" y "disfunciones políticas de entidad" como la reflejada en la renovación del Tribunal Constitucional, el autor prescribe un "alivio de tensiones" en forma de gobierno de gran coalición que, además, haría que la oposición dejara de "transmitir al exterior imágenes y análisis muy exagerados" sobre la economía española.

Asimismo, Tezanos considera que esa gran coalición permitiría adoptar "iniciativas eficaces, de naturaleza fiscal y financiera", que a su juicio no se emprenden "por miedo a lo que podría 'decir' la oposición". Un gobierno de coalición, en definitiva, ahorraría los esfuerzos que invierten los partidos en un "mero rifirrafe, tan desagradable como improductivo".

miércoles, 2 de febrero de 2011

SAN BLAS EL DEL VERANO Y SAN BLAS EL DEL INVIERNO







Hoy, día 3 de febrero, celebramos la popular fiesta de San Blas. El popular dicho que nos recuerda Bonifacio Blázquez líneas abajo, ha hecho que el día de la fiesta de este santo, aunque bastante desconocido, sea, sin embargo, conocida por todos: el 3 de febrero.

Bonifacio Blázquez fue un sacerdote de Avila, natural de Serranillos. Junto a su bonhomía y santidad dejó siempre muestras de lo que era: un paradigma del típico hombre de Serranillos, con los rasgos característicos de la gente de su pueblo, que más abajo describirá magistralmente. Transcribo aquí parte de un breve estudio de Bonifacio Blázquez -Boni, para los amigos- sobre los orígenes de la fiesta de San Blas que, como en otros pueblos de la zona sur de Gredos, se celebra no hoy, sino el día 1 de septiembre. De este estudio he entresacado algunos datos referentes al pueblo, Serranillos, que en otro momento colgaré aquí. Ahora he extractado lo referente a San Blas y lo hago como homenaje y en memoria de este gran sacerdote abulense, amante de su pueblo y de sus gentes y cuyos restos mortales descansan en el cementerio de su pueblo natal.
Román Encabo




SAN BLAS,
EL DÍA 1 DE SEPTIEMBRE






Posiblemente no hay nadie en nuestra cultura occidental que no haya oído alguna vez el dicho, refrán o frase de que “para S. Blas, la cigüeña verás”. Por esto, en todos los pueblos se sabe que este santo tiene su fiesta el día 3 de febrero.

Todos nos hemos preguntado muchas veces por qué en nuestro pueblo, Serranillos, se celebra el día 1 de septiembre. Para saberlo y comprenderlo nos tenemos que remontar a los orígenes del pueblo. No se si lo conseguiré, pero voy a intentarlo.

Una de las fuentes más fiables sobre los orígenes de Serranillos está reflejada en el libro de Angel Barrios “Estructuras agrarias y poder en Castilla, (Ejemplo de Ávila 1.085 – 1.320)”. Al hablar en el tomo II del incremento demográfico y de las nuevas poblaciones en la provincia de Avila escribe: “en el Valle del Alberche y en la tierra de Pinares se crearán 27 aldeas.

Serranillos, (año 1.265). Navalosa, (año 1.329). Navarrevista, (1.340)”,
etc, etc.

Según estos datos, Serranillos es la población más antigua dentro del valle del Alberche, después de Burgohondo, donde ya existía la célebre Abadía desde el siglo XI. De esta Abadía dependerán todos los pueblos del valle a excepción de Serranillos que, incluso hasta finales del siglo XIX -importante para el tema que tratamos-, sigue perteneciendo al Arciprestazo de Mombeltrán. Y aún hoy día, al Partido Judicial de Arenas de S. Pedro.

El origen o fundadores de este pueblo, según tradición oral común que todos conocemos, es la de unos pastores del Valle del Tietar y del Barranco de la Villa, que tratando de evitar el sufrimiento del sol estival decidieron subir, sierra adentro, hasta las cumbres medianeras de Gredos oriental donde encontraron pastos abundantes para los rebaños y frescos aires y aguas para ellos. Poco a poco fueron prolongando sus estancias hasta que algunos se quedaron definitivamente. Tomaron posesión y nadie les molestó por “apropiarse” de aquellas inhóspitas tierras.

Quedó este pueblo o aldea, en aquellos tiempos, como línea divisoria entre dos grandes poderes, uno eclesiástico y otro civil. Entre el poder de los Frailes de la Abadía de Burgohondo y los territorios que años después pertenecerán al ducado de Alburquerque y el primero de sus duques lo llamará Mombeltrán. Al quedar Serranillos en medio de ambos “poderes”, tanto unos como otros aspiraron siempre a ampliar sus dominios y territorios. Y ahí quedó Serranillos olvidado de todos, pasota, indiferente y apático, libre como el viento, pero sin término.

Al asentarse definitivamente aquí, trajeron consigo sus costumbres, folklore y devociones. No hicieron otra cosa que imitar a todos los pueblos que a lo largo de la historia han emigrado. Si los primeros pobladores vinieron del Valle del Tietar y del Barranco de la Villa, he comprobado que en el pueblo de La Adrada celebra solemnemente y tiene por patrón a S. Blas. En la Villa de Mombeltrán en el altar primero de la nave izquierda hay una estatua muy buena de S. Blas. No es extraño, por tanto, que los primeros habitantes quisieran venerar, al construir su Iglesia, al que habían tenido siempre por patrón y guía, a S. Blas.

¿Por qué se cambio la fecha de febrero a septiembre? Posiblemente, son conjeturas, algunos de los primeros habitantes irían todos los años a la fiesta de sus respectivos pueblos anteriores. Otros se quedarían celebrándola en su nueva residencia. Hubo, por tanto, un intercambio en la celebración: Unos años se haría en este pueblo y otros preferirían celebrarlo en sus anteriores lugares.

El clima duro y frío que suele hacer en febrero por estos pagos, se encargó de hacer la separación definitiva. El pueblo soberano decidió trasladar su fiesta al verano. La fecha la eligieron por razones prácticas. Los que somos de este pueblo, y ya de cierta edad, recordamos que para el uno de septiembre ya se habían realizado las tareas de la recolección de la hierba y el centeno y no habían comenzado aún la de las judías y patatas. Entre los familiares y parientes de los nuevos habitantes, el clima y “su antigua fiesta” no eran ya óbice para el encuentro amistoso y familiar. Y así quedó definitivamente la fiesta: S. Blas el del verano y S. Blas el del invierno. Nadie puede negar que los habitantes de Serranillos en esto de trasladar la fecha de la fiesta al verano, como en otras cosas que no viene al caso enumerar, fuimos los pioneros. Pues, nos adelantamos a los demás pueblos, en varios siglos.

¿En qué fecha se hizo el cambio? No es fácil averiguarlo. Hace dos meses vi y manejé el archivo parroquial de este pueblo, que se encuentra en un estado desastroso. Debido a las goteras, dejadez e incuria no se puede manejar. Gracias a Dios hoy se encuentra en Avila, al cuidado de las santas y expertas manos de D. Bernardino Jiménez, esperando que algún día con medios modernos sus libros y legajos se puedan abrir, leer y hojear sin romperse.

La primera partida legible del libro primero de bautismos data del año 1.626. Como algunas páginas no se encuentran en el libro, la fecha es un poco anterior. Teniendo en cuenta que hasta el final del Concilio de Trento, año 1.547, no se obligó a las parroquias a inscribir en libros los bautizos, matrimonios y defunciones, podemos deducir que al menos dos siglos antes ya existía funcionando la iglesia de este pueblo como tal. Esa puede ser la fecha en que se realizó el cambio y ya se celebraría, algunos años antes, la fiesta de S. Blas. Entre los siglos XIV y XV ya habría Capilla y culto religioso en este pueblo.

En agosto de 1.936 quedaron destrozadas prácticamente todas las imágenes excepto S. Bartolomé por tener el puño cerrado al extraviarse la palma del martirio. También quedó deteriorada la escultura original de S. Blas, que fue reemplazada a principios de los años 40 por la actual, cuyo escultor era de Villarejo del Valle y se llamaba Enrique Hernández Bustillo.

...... La escultura primitiva, más pequeña pero menos artística, cuya tasación en 1.923 era de 700 pts, pasó de unas manos a otras hasta que, como José en Egipto, fue vendida en Talavera. Después de todo tuvo suerte. Hoy estará expuesto en algún Hotel o Parador de turismo y no como S. Bartolo, el torso del Stmo. Cristo y otras más que terminaron sus días en la estufa del salón parroquial en la década de los 60. ¡Debió hacer mucho frío aquel invierno!

No se si os he aclarado algo. Mi intención ha sido esa. Un saludo

B. Blázquez



Por parecerme sensato y veraz, transcribo el editorial de ABC digital de hoy 02-02-2011, donde se refleja con bastante objetividad la crítica situación por la que atraviesa hoy Egipto:






"Egipto vivió ayer una de las jornadas más importantes de su historia como país independiente. Según reconoció Mubarak en un discurso de última hora al país, el régimen egipcio no seguirá siendo el mismo después de que miles de manifestantes tomaran la plaza cairota de Tahrir. La república vitalicia no será ya la república hereditaria en que pretendía convertirla Mubarak, tras anunciar que no se presentará a las próximas elecciones. Ante la pasividad del ejército, que calificó de legítimas las protestas, y una decreciente beligerancia de la policía, los manifestantes parecen dispuestos a continuar en la plaza hasta que Mubarak abandone la presidencia.

La formidable convulsión política que vive el mundo árabe obliga a tomar partido entre las aspiraciones de libertad y de progreso de unas poblaciones sojuzgadas y el complejo juego de intereses, tanto internos como internacionales, que han mantenido en el poder a sus tiranos. A favor de Mubarak se han pronunciado hasta ahora aquellos autócratas árabes que ven en su suerte la que podrían correr ellos. También el Gobierno de Benjamín Netanyahu y el presidente Simón Peres, guiados por una interpretación limitada, cortoplacista y seguramente equivocada de los intereses de Israel. Al menos de manera expresa, no ha sido el caso de Estados Unidos ni de la Unión Europea, que, pese a los temores y las incertidumbres que despierta en sus diplomacias el proceso en curso, han optado por exigir una transición ordenada y la celebración de elecciones libres y con garantías -el presidente Obama le pidió ayer a Mubarak que no vuelva a ser candidato-. Europa ha tardado demasiado en adoptar esta posición, pero constituiría un grave error que, una vez adoptada, no perseverase en ella.



Las necesarias cautelas ante un proceso de incierto desenlace no pueden hacer, sin embargo, que se confunda la opción que merece el apoyo y la que no. Las aspiraciones de los manifestantes no deben ser defraudadas por el hecho de que Hosni Mubarak represente la continuidad de un statu quo con el que la comunidad internacional ha convivido hasta ahora sin hacerse demasiadas preguntas, negándose a ver la trágica realidad que provocaba en Egipto. Miseria, corrupción y falta de libertades no es un precio aceptable a cambio de ninguna cooperación, sobre todo cuando son otros, en este caso los egipcios, quienes deben pagarlo.



Las incógnitas del momento están colocando en el primer plano político a figuras egipcias de reconocido prestigio internacional, como Mohamed el Baradei, Amr Musa o el premio Nobel Ahmed Zewail que, llegado el caso, podrían asegurar la transición hasta unas elecciones. Estados Unidos ya ha comenzado a hablar con el antiguo director general de la agencia de la ONU para la energía atómica. Pero es difícil aceptar que el papel de cualquiera de estas figuras debiera ir más allá de asegurar esa transición, puesto que ni siquiera su relevancia internacional puede sustituir lo que los manifestantes están exigiendo en la plaza de La Liberación y en otras ciudades egipcias: el derecho a elegir a sus gobernantes. Si estas figuras tienen hoy un espacio es, sencillamente, porque Mubarak no goza siquiera de credibilidad para llevar al país al que ha maltratado durante décadas hasta unas elecciones democráticas.



Tahrir, el nombre de la plaza cairota elegida como escaparate por los manifestantes, significa liberación en árabe. Egipto se adentra en un tiempo en que, con Mubarak defenestrado, ese nombre podría convertirse en un símbolo y en una realidad. Que así sea depende de los egipcios, pero también de la posición que adopten las principales potencias. Un error de estas al escoger campo podría resultar fatal, sobre todo si está dictado por una traición a los ideales democráticos que dicen defender".

PACTO ECONÓMICO Y SOCIAL 2011





Las fuerzas sociales -Sindicatos y Patronal- y el Gobierno han cerrado y sellado ayer un Pacto Económico y Social que tiene como pilares fundamentales la reforma del sistema de pensiones y las políticas de empleo.


No cabe duda de la importancia de este Pacto. Son medidas necesarias, aunque, posiblemente, insuficientes. Pienso que las medidas ayer acordadas tienen que ser implementadas con otras que deben resultar del acuerdo con el otro partido mayoritario de la oposición y ser pulidas en sede parlamentaria.

Hoy, de momento y para dejar constancia aquí, cuelgo el link en que puede encontrarse íntegro el texto del Pacto:

http://www.elpais.com/elpaismedia/ultimahora/media/201102/02/espana/20110202elpepunac_1_Pes_PDF.pdf

Pienso que, en líneas generales, el Pacto Social es beneficioso. Un dato en este sentido: La prima de riesgo de la deuda pública española lleva varios días descendiendo. Hoy mismo, fecha en la que han inmortalizado la foto del Pacto, el indicador ha fluctuado entre 181 -por la mañana- y 185 -por la tarde- puntos básicos. Recordemos que ha llegado a sobrepasar los 260 puntos y, a mayor abundamiento, que los niveles de hoy no se registraban desde principios del noviembre pasado.


En posteriores post iremos hablando y analizando de sus puntos más importantes. El evento lo merece.

AZNAR: LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS "TIENEN" PROBLEMAS


“En el debate sobre el Estado autonómico se ha alcanzado un nivel de confusión que debemos despejar lo antes posible. Un nivel de confusión que nace de la moda de debatir sobre estereotipos, eslóganes y prejuicios, en lugar de hacerlo sobre análisis detallados, estudios sólidos y juicios solventes.

El estudio que hoy presentamos no ayudará en nada a los amantes del eslogan estruendoso, porque es fruto de un trabajo concienzudo obra de tres personas expertas y serias. Quiero dar las gracias a los tres autores: a Julio Gómez-Pomar, a Mario Garcés y a Gabriel Elorriaga, porque trabajos como éste son la base que necesitamos para que el debate político en España se apoye en datos y argumentos y pueda así elevarse desde el ínfimo nivel al que algunos lo han rebajado.

Porque, en buena medida, nuestro futuro como nación va a depender de que sepamos abordar en serio los debates realmente importantes. Y entre ellos destaca la necesidad de una profunda reforma de nuestro modelo de gestión territorial para hacer lo que otros países, comenzando por Alemania, ya han hecho recientemente: transformarlo en un activo económico y social que ayude a generar progreso y bienestar y que vertebre mejor al conjunto del país.

Quiero aprovechar la presentación de este magnífico Informe de FAES para exponer muy brevemente tres razones que hacen inaplazable un debate serio y profundo sobre la reforma de nuestro Estado autonómico. Tres razones que no agotan los argumentos a favor de esta iniciativa pero que, a mi juicio, son suficientes para mostrar su importancia.

En primer lugar, me parece esencial señalar que la reforma del Estado autonómico no es sólo ni principalmente un asunto local, como algunos pretenden. Muy al contrario, es un asunto de política nacional y ya se ha convertido en un tema inaplazable de política europea de primera magnitud.Lo es porque el proyecto de moneda común, que es el euro, tiene que avanzar hacia nuevos compromisos de gobernanza, de disciplina presupuestaria y de competitividad de los que deben responsabilizarse todos los niveles de la Administración.

En este nuevo contexto europeo, con exigencias perentorias, el rendimiento económico e institucional de España debe mejorar sustancialmente. El rendimiento económico y el institucional no se pueden conseguir el uno sin el otro. Hoy menos que nunca. La renuncia a cualquiera de ellos será un lastre para el conjunto.

Alemania, modelo a seguir

Hace ya algunos años, Alemania, una nación con estructura federal, con unos estados federados, por cierto, con menos competencias que nuestras comunidades autónomas, inmersa por entonces en una dura crisis económica, llegó a la conclusión de que el funcionamiento defectuoso de su modelo federal bloqueaba la adopción de las reformas necesarias para el país y frenaba su modernización.

Alemania llegó a la conclusión de que su modelo de organización territorial necesitaba reformas. Reformas para hacer posible el gobierno para todos los alemanes, gobernara quien gobernara. Y reformas también para evitar solapamientos, duplicidades y, por tanto, una fuerte sobrecarga de gasto público, es decir, de impuestos, con lo que ello representa de dificultad para competir en la Europa del euro.

Las dos grandes fuerzas políticas alemanas acordaron una reforma constitucional que mejoró notablemente el gobierno de la nación. Se trata de un ejemplo de cómo se pueden hacer bien las cosas en una nación europea mediante fórmulas de amplio consenso político.

El nacionalismo y la izquierda, en busca del “desbordamiento de la Constitución”

Hoy, buena parte de la atención de nuestros socios europeos y de las principales instituciones económicas de todo el mundo está puesta en cómo pensamos resolver los españoles los problemas que se manifiestan en nuestro modelo de organización territorial.
Porque en estas circunstancias, pensar que basta con seguir haciendo política de vuelo corto con el modelo autonómico sería sencillamente dar la espalda a los problemas. Así han venido haciéndolo en nuestro país los que tenían que abordarlos, con los resultados que todos sufrimos.

En este debate, confieso que cuesta recibir lecciones de autonomismo de los que no han dejado de proclamar que el modelo autonómico de la Constitución es una fórmula caduca e incluso un obstáculo para la convivencia. Me refiero, como pueden suponer, al nacionalismo independentista y a la izquierda que ha buscado el desbordamiento de la Constitución para imponer por la puerta de atrás una fórmula confederal en España.

Comenzaré por recordar que el informe de FAES que hoy presentamos lleva por título
‘Por un Estado autonómico racional y viable’.

Eso quiere decir que, en mi opinión, y me gustaría subrayarlo, las Comunidades Autónomas no son un problema. Lo que ocurre es que las Comunidades Autónomas "tienen" problemas. Problemas que es necesario resolver.

Negar que las Comunidades Autónomas tienen problemas graves que hay que abordar de inmediato es hacer un ejercicio de irresponsabilidad impropio de un país serio y que aspire a proyectar confianza. Si queremos seguir formando parte del proyecto europeo debemos resolver, entre otros, los problemas de nuestro Estado autonómico, porque de lo contrario tendremos dificultades crecientes para seguir anclados en el euro. Y eso supondría para España ver amenazada gravemente su condición de socio europeo de primera y pasar a ser socio de segunda.

Es decir, supondría dejar de contar en Europa, quedar fuera de las grandes decisiones europeas, y abandonar una de las claves de prosperidad y de modernización de nuestro país desde 1978, una clave de prosperidad insustituible.

Por tanto, la primera razón para reformar el funcionamiento de nuestro Estado autonómico es que queremos seguir siendo protagonistas del proyecto europeo. Y el proyecto europeo necesita que España lo haga tan bien como sabe hacerlo.

La segunda reflexión que a mi juicio debe enmarcar el debate sobre el modelo territorial es que nuestro sistema de bienestar está encomendado a las Comunidades Autónomas. Y por cierto, me precio de que bajo mi Gobierno, y con pleno consenso, se completaron las transferencias de Sanidad y Educación a todas las Comunidades Autónomas, con la voluntad política de culminar nuestro modelo autonómico.

Hoy, por razones de eficiencia, de equidad y de coherencia política, necesitamos poner al día este modelo para garantizar plenamente su futuro. Han sido las comunidades autónomas las responsables de desarrollar y gestionar las principales políticas de bienestar en las últimas décadas. Por eso debatir sobre los problemas del modelo autonómico es mucho más que recrear los debates identitarios, aunque a algunos les parezca entretenido dedicarse sólo a esos asuntos.
Son problemas que afectan de lleno a nuestro modelo de bienestar y que, por ello, afectan a la cohesión social y a la igualdad de oportunidades que una democracia avanzada debe asegurar. Se trata de garantizar que todas las administraciones trabajen al servicio de todos los españoles.
En consecuencia, la segunda razón para reformar el funcionamiento del Estado autonómico es ésta: para asegurar el futuro de nuestra sociedad de bienestar. Si no estamos a la altura de las reformas que exige el modelo autonómico, será nuestra sociedad de bienestar la que pague las consecuencias.

Finalmente, como tercera reflexión, quiero reiterar la opinión que tuve ocasión de expresar hace algunos meses después de que el Tribunal Constitucional se pronunciara sobre el Estatuto de Cataluña. Tras la sentencia, creo que no es posible debatir con el rigor necesario acerca de nuestro modelo autonómico sin tener presente que el Tribunal ha fijado ya de manera inequívoca los límites jurídico-políticos del proceso descentralizador español.

A partir de ahí, se reconozca o no, el debate se sitúa en lo que el Consejo de Estado -en su
informe de febrero de 2006- llamó “la superación de la apertura del modelo autonómico”. En otras palabras, el modelo de Estado tiene una configuración constitucional definida y, por tanto, no puede quedar a merced del aventurerismo político de mayorías pasajeras. Un Estado puede ser muchas cosas pero, desde luego, no puede ser imprevisible.

Hay quienes, frente al Estado autonómico, exhiben su nostalgia premoderna por fórmulas confederales, ninguna de las cuales ha vivido para contarnos sus supuestas ventajas.
Hay quien sigue patrocinando un destructivo juego de suma negativa entre el Estado y las Comunidades Autónomas que debilita a todos. Y, por supuesto, en este repertorio de despropósitos, hay quienes trabajan a favor de un Estado residual. Unos porque consideran que ese Estado residual es el único deseable y otros porque creen que es el único posible.

Pero nada de esto es la opción de la Constitución, y nada de esto es la opción de la ciudadanía. Bien al contrario, todas ellas son apuestas políticas temerarias y empobrecedoras. Y siempre propuestas de minorías, de minorías locales o políticas, no de mayorías sociales.

Necesitamos un Estado capaz de responder a las exigencias y a las expectativas de los
ciudadanos. Un Estado capaz de asegurar:
las reglas del juego,
la igualdad ante la ley y los tribunales;
las políticas de cohesión,
el acceso de todos los ciudadanos en condiciones de igualdad a los servicios públicos,
y los derechos y libertades de todos y cada uno de los españoles en toda España.

Necesitamos un Estado capaz de impulsar las reformas necesarias, que pueda defender
de manera creíble nuestros intereses en el exterior. Lo necesitamos todos y lo necesitamos ya. Un Estado que encuentra su fundamento en la Nación como único sujeto soberano y en la Constitución como única fuente de legitimidad de sus poderes. Un Estado de lo común, de lo que afecta a todos, de lo que todos tenemos derecho a decidir, de lo que todos podemos legítimamente esperar de los demás.

Así pues, la tercera razón para reformar el funcionamiento de nuestro Estado autonómico es ésta: para hacer plenamente vigente la Constitución de 1978 y para preservar el derecho de la Nación española a decidir su propio destino libremente, a trabajar por su prosperidad y a permanecer unida.

Tenemos que evitar que la deriva de nuestro modelo autonómico anule las ventajas y
oportunidades de ser un país grande en Europa. Tampoco debemos desaprovechar el acierto para nuestra convivencia de la fórmula de organización territorial consagrada en nuestra Constitución, que es la de de un Estado descentralizado.

El objetivo debe ser el pleno aprovechamiento de las economías de escala para que los españoles compitan con éxito en el mundo globalizado. Porque España no puede competir ni en Europa ni en el mundo con unas Comunidades Autónomas aspirando a convertirse en mini-Estados. Simplemente, no es posible.
Al mismo tiempo, debemos estimular la competencia institucional entre las Comunidades Autónomas para mejorar el rendimiento de nuestro modelo territorial en beneficio de todos los españoles.

No podemos mostrarnos hacia el exterior como un territorio fragmentado, enfrentado, inseguro y escasamente previsible. Tampoco debemos convertir nuestra diversidad territorial en un viaje a ninguna parte impulsado por la obsesión de ser “igual de diferentes”, una ambición tan extravagante como paradójica.

Confío en que dentro de muy poco tiempo los españoles respaldarán en las urnas la búsqueda de un acuerdo ampliamente mayoritario en torno a la necesaria reforma de nuestro modelo autonómico. Estoy convencido de que el Informe que hoy presentamos constituye una contribución muy valiosa, fruto de la solvencia y el rigor intelectual de sus autores, que será apreciada por todos los que desean lo mejor para nuestro país”